Esclerosis múltiple: Barreras para una alimentación sana

Los síntomas de la esclerosis múltiple (EM) 

Estar alerta a algunas de las maneras en que los síntomas de la esclerosis múltiple (EM) pueden interferir con una alimentación saludable puede ayudarle a mantenerse en el buen camino. Incluso con las mejores intenciones, mantener buenos hábitos alimenticios puede ser difícil. Por ejemplo, considere estos síntomas molestos: Fatiga: Si el simple hecho de pasar el día requiere toda su energía, dedicar tiempo y esfuerzo a las comidas saludables puede parecer abrumador.
Por lo tanto, en lugar de comer comidas balanceadas, puede que se encuentre tomando los bocadillos más cercanos (poco saludables), o puede que busque una solución rápida - una ráfaga de algo azucarado que le dé un impulso momentáneo pero que luego le deje cansado y hambriento - en lugar de proteínas, lo que reduce la fatiga y le ayuda a mantener un nivel de azúcar en la sangre más consistente. Muy pronto usted tiene un círculo vicioso en marcha, con la fatiga que contribuye a una mala nutrición y una mala nutrición que alimenta su fatiga.

Herramientas útiles para cocinar

Un terapeuta ocupacional (OT, por sus siglas en inglés) puede darle muchos consejos para ahorrar energía, incluyendo recomendaciones para aparatos y herramientas útiles para cocinar, ideas sobre cómo organizar su espacio para cocinar y estrategias para simplificar sus viajes de compras. Llame a la Sociedad Nacional de EM para obtener referencias a especialistas con experiencia en EM (800-FIGHT-MS). Depresión: Al igual que la fatiga, la depresión es común en la EM. Y, desafortunadamente, las personas que están deprimidas pueden experimentar cambios significativos en sus apetitos, ya sea comiendo mucho menos o mucho más de lo que solían hacerlo.

Comida reconfortante

Si usted ha perdido el interés en la comida o parece que no le gusta comer de la manera en que solía hacerlo, o si se encuentra comiendo mucha comida reconfortante no tan saludable para aumentar su ánimo, asegúrese de decírselo a su médico. Otras cosas, como la fatiga y ciertos medicamentos, pueden causar cambios en el apetito, pero aún así es importante averiguar si la causa es la depresión. Problemas de accesibilidad o movilidad: A veces la gente tiene dificultades para preparar comidas saludables porque no pueden navegar por las tiendas o sus cocinas de la manera en que lo hacían antes.

Los mostradores 

Por ejemplo, los alimentos pueden estar en estantes inaccesibles, las ollas y sartenes pueden estar atascadas en lugares alejados, la cocina puede ser demasiado pequeña para acomodar una motocicleta y los mostradores pueden estar demasiado altos, por lo que cuando las cosas se ponen más difíciles, es posible que te encuentres saltándote comidas o confiando más en los alimentos preparados o en la comida para llevar. No somos grandes fans de ninguna de estas estrategias. Si usted se encuentra comiendo más alimentos preparados, asegúrese de revisar los ingredientes porque muchos alimentos congelados son altos en sodio o grasa, lo cual puede elevar la presión arterial y hacer que usted aumente de peso.
Además, un terapeuta ocupacional puede ayudarlo a encontrar la manera de organizar y hacer más accesible su espacio de cocina para que los artículos que necesita estén a su alcance. Para obtener información detallada sobre la EM y la nutrición, y estrategias prácticas para la selección y preparación de alimentos, consulte el folleto de la Sociedad Nacional de EM, Food for Thought: MS and Nutrition, o llamando al (800) FIGHT-MS.